El cuento de la vivienda

Un cronopio pequeñito buscaba la llave de la puerta de la calle en la mesa de luz, la mesa de luz en en dormitorio, el dormitorio en la casa, la casa en la calle.

Aquí se detenía el cronopio, pues para salir a la calle precisaba la llave de la puerta.


7 comentarios

Anónimo dijo...

Qué grande era Cortázar. Qué capacidad la de él para escribir un cuento tan intemporal. Y qué capacidad la tuya para establecer este paralelismo con el problema de la vivienda y la vida en general. ¿Alguno de vosotros sabe cómo escapar del círculo vicioso en el que vivimos? ¿Existe todavía alguien en este mundo (el occidental al menos) a quien no le aprieten la nuez suave y lentamente?

Anónimo dijo...

cocamarín:
Creo que la salida está en nosotros, pero no sé hasta que punto queremos encontrarla. Evidentemente, hablo de un nosotros genérico. El otro día entrevisté al presidente de los promotores de Lleida. Estaba convencido de que no bajaría el precio de la vivienda, y si amenazaba con hacerlo, él no tendría problemas porque construiría pisos de protección oficial.
Mientras haya gente que vayan como vayan las cosas, siempre gane, otros tenemos que soportar los grilletes y la soga.
La única opción que nos queda es denunciar, gritar y actuar (eso si, siempre en pequeños círculos porque si no nuestras acciones se diluyen?.

hatsue-san dijo...

No, no, ya no sirve sólo protestar. Montemos un grupo político: como ciutadans, pero bien hecho, sin pseudo-fachas licenciados por ESADe.
XD

Es curioso, porque en el mundo desenvolupado, donde se supone que tenemos todos los lujos, la gente empieza a asfixiarse. No es casualidad.

Anónimo dijo...

Normal, que la gente que está rodeada de miseria no piense en las cosas sobre las que reflexionamos nosotros. Ya lo dije en otro post, estamos en el lado bueno del mundo. En la cara oculta sólo buscan sobrevivir. Mientras, nosotros perdemos el tiempo en insignificancias.
Por cierto Hastsue, so pena de parecer pedante, no es desenvolupado es desarrollado. Lo siento, es deformación profesional. Ja ja.

eightiesfan04 dijo...

qué inesperado, yo que pensaba que ibas a soltar un rollo sobre la vivienda...¿entonces es de Cortázar? y ¿por qué no lo pones?

Anónimo dijo...

¿Y cómo se combate la miseria espiritual? No es una pregunta retórica, me gustaría ver ideas, por aquello de enriquecernos.

Anónimo dijo...

hola compis...
hoy he entrado en el blog de Ricardo... ya iba siendo hora... Pues leyendo vuestros comentarios sobre la miseria espiritual y en consecuencia humana... yo creo que nos deberíamos relacionar entre nosotros muchos más desde nuestro corazón y no tanto desde la mente. Uno forma de practicar eso es la meditación, al menos la que practico yo.
Bueno, compis, un gran abrazo a modo cronopio... Bon nadal ;-)